Ya lo hemos dicho, la trabajemos o no, todos tenemos una marca personal, que para nada depende de nuestra forma de trabajo. Podemos ser autónomos (freelance), empleados, amas de casa o tener un perfil mixto y, la realidad, es que siempre estaremos dejando una impresión en nuestro entorno.
Ahora, trabajar la marca personal sí es una decisión que se puede tomar y dada la situación mundial que tenemos, he decidido sumar algo positivo al #yomequedoencasa, para aportar desde mi área de acción a que podamos llevar este acto de responsabilidad y solidaridad, con un toque de crecimiento personal.
Así que durante los próximos 10 días (lo días hábiles durante dos semanas), compartiré un ejercicio diario para que quien quiera, desde la comodidad de su hogar, empiece a encontrar y organizar esas piezas que conforman el gran puzzle/rompecabezas que es su marca personal. ¡Comenzamos!
El ejercicio de hoy va de roles y tareas. Es un ejercicio muy sencillo pero revelador, porque, en la realidad, son muy pocas las personas que se han sentado, lápiz y papel en mano, a detallar todo su campo de acción. Para unirte, solo necesitas seguir tres tres pasos y una superficie en la que puedas escribir (digital o analógica).
También puedes descargarte el PDF que he preparado para esta ocasión 👇
- Lo primero que tienes que hacer es pensar en tu día promedio, desde que despiertas en la mañana hasta que te vas a dormir, y empieza a nombrar las relaciones que tienes con aquellos que te rodean o los títulos que te identifican. ¿Eres madre, padre, compañero de trabajo, hijo o hija, proveedor, jefa o jefe, emprededor o emprendedora…? ¡Esos son tus roles! Y no te olvides de incluir la relación más importante, la que tienes contigo mismo.
- Ahora, de cada uno de esos roles, empieza a señalar las tareas que tienes asociadas, ¿Programar reuniones, liderar proyectos, llevar al colegio, aseo personal, pagar impuestos, visitar, ocio…? No te limites. Piensa en absolutamente todas las tareas que debes ejecutar desde ese rol.
- Identifica el origen de cada tarea, es algo debes hacer o algo que quieres hacer. Y si son cosas que debes hacer, pregúntate ¿es una responsabilidad o lo hago para complacer a otros? Lo importante de las tareas es que, como la mayoría de cosas en marca personal, no partan de la satisfacción al otro, sino desde la satisfacción interna o desde necesidad inminente de hacerlas. Conocer el origen te permitirá gestionar mejor tus prioridades y poner tus propios intereses en el lugar que corresponden.
¿Para qué nos sirve este ejercicio?
Para darle cara a esa sensación de estar constantemente abrumados con nuestra realidad. A veces sentimos que abarcamos más de lo que podemos, pero no vemos en detalle por dónde se está filtrando nuestro esfuerzo y tiempo.
Para sincerarnos y saber qué cosas son realmente relevantes y cuáles las estamos haciendo por simple inercia. Es un ejercicio de aceptar aquello que es necesario, descartar lo que está en el limbo y reencontrarnos con la parte de placer en aquello que decidimos hacer.
Para ganar en autoconocimiento y comprensión. Somos muy duros con nosotros mismos, pero mostrarnos el alcance de nuestros actos y los matices de nuestras relaciones nos ayuda a poner en valor lo que aportamos al mundo.
Para poder identificar en qué áreas/roles quieres trabajar, fortalecer o cambiar desde tu marca personal. Esto lo entenderás mejor mañana con nuestro ejercicio del Día 2 de Personas que Marcan.
¿Por qué debe ser escrito?
La respuesta es muy sencilla, el lenguaje simplifica a la mente y la escritura lo hace aun más. Nuestra mente es infinita y tener todo “ahí” hace que no tengamos claros los límites ni el alcance de nuestros pensamientos, obligarnos a ponerlos en palabras da contexto y aporta capacidad de comprensión y ejecución, algo que sería muy complejo si lo dejamos solo en lo vago de una idea.
Así que ya sabes, #quédateencasa y conviértete en una #personaquemarca
Nos leemos mañana.
Nat.