“Ignorantia juris non excusat.”
“El desconocimiento de la ley no nos exime de su cumplimiento”. En otras palabras, no importa que no sepas que “algo no se puede hacer”, si lo haces “eres culpable” y sobre ti caerá todo el peso de la ley.
Duro pero real. Una sentencia que nos obliga a no ser indiferentes a nuestro sistema y a informarnos/educarnos. Por eso, creo que el mismo principio debería aplicar al consumo.
“No saber” no te hace ser una persona “engañada o manipulada”, te hace “culpable” o, mejor dicho, “responsable”.
Estamos en la era de la información. Tenemos más acceso del que nunca soñamos para indagar, preguntar, conocer y descubrir. ¿Por qué desperdiciaríamos ese poder? ¿Por qué mirarnos como víctimas y no como responsables?
No. No digo que todas las marcas sean éticas o actúen correctamente. Sabemos que puede pasar todo lo contrario y, justo por eso, porque sabemos, debemos dudar, pensar y decidir con fundamento nuestras conductas de consumo.
¿Y tú? ¿Eres víctima o responsable?